2/8/2025 | Rafael Peralta Romero (El Nacional, República Dominicana)
No siempre las palabras tienen significado absoluto, es decir un valor semántico que no deje duda sobre la intención del hablante cuando pronunció aquel vocablo. Y no me refiero a palabras que tienen más de un significado o polisémicas (mora, plazo y mora, fruta) o las que se pronuncian del mismo modo, pero guardan variación de significación, por ejemplo, valla (barrera, cerca) y vaya (forma del verbo ir).
Muchas cosas pueden tener un valor relativo. Ocurre en la economía, en el arte, en la naturaleza y sobre todo en la política. No es extraño que ciertos políticos rechacen una idea o acción y meses después se muestren a favor.
En matemática se llama valor relativo al que tiene una cantidad con respecto a otra. Las palabras cuyo valor depende más del gusto, el interés o el punto de vista de quien las emplea son los adjetivos.