7/11/2025 | Orlando Alba (Acento, República Dominicana)
En muchos lugares se ofrece una descripción heterogénea o ambivalente de la sinonimia, que abarca tanto la igualdad (equivalencia) como la simple semejanza (parecido estrecho) de sentido: ‘palabras que tienen una misma o muy parecida significación’. El diccionario académico (DLE), por ejemplo, para la entrada sinónimo, ma, dice textualmente lo siguiente: ‘dicho de una palabra o de una expresión: Que, respecto de otra, tiene el mismo significado o muy parecido, como empezar y comenzar.’
Está claro que, si se adopta la segunda parte de la definición y la sinonimia se entiende como una relación entre palabras de sentidos muy parecidos, ningún lingüista niega su existencia. Nadie tiene reparo en aceptar esta definición vaga de la sinonimia porque en todas las lenguas existe una gran cantidad de parejas (y series) parecidas o muy parecidas en su significado. En esta clase entran débil–flojo–frágil, creer–pensar, simpático–atento, gana–deseo, funcionar–actuar, casa–vivienda, y muchas más, incluyendo los pares con diferente intensidad de significado, como amor–cariño, caliente–ardiente, socorro–ayuda, risa–carcajada.
Más en acento.com.do
Fundéu Guzmán Ariza República Dominicana