Los adverbios recomendados en la lengua general son adelante y delante; alante solo es apropiado en contextos informales o coloquiales.
Sin embargo, no es raro encontrar en los medios de comunicación ejemplos como estos: «Licey, Estrellas y Águilas pican alante en el Torneo de Béisbol Invernal», «El club Pantoja sigue alante en la liguilla del fútbol dominicano», «Hoy miramos hacia alante, y hemos conseguido una economía sólida» o «Espalda recta, piernas ligeramente flexionadas, levanta los brazos hacia alante y luego hacia los lados».
Según explica la segunda edición del Diccionario panhispánico de dudas, la forma alante, creada posiblemente por analogía con atrás, se emplea en lugar de los adverbios adelante o delante en contextos informales o cuando se quiere dotar al texto de un carácter coloquial. Por tanto, en situaciones normales o cultas conviene evitar su uso.
Así, en los ejemplos anteriores habría sido preferible escribir «Licey, Estrellas y Águilas pican adelante en el Torneo de Béisbol Invernal», «El club Pantoja sigue adelante en la liguilla del fútbol dominicano», «Hoy miramos hacia delante, y hemos conseguido una economía sólida» y «Espalda recta, piernas ligeramente flexionadas, levanta los brazos hacia delante y luego hacia los lados».
Esta recomendación es adaptación de la publicada por Fundéu RAE el 1 de diciembre: adelante, mejor que alante
Fundéu Guzmán Ariza República Dominicana