28/8/2020 | Roberto Guzmán (Academia Dominicana de la Lengua)
APLATANAR(SE) – TROPICALIZAR
“Las autoridades dominicanas tienen que, si se quiere, APLATANAR las recomendaciones. . .”
Este verbo no guarda secreto para los habitantes de las Antillas Mayores de habla hispana. Además, puede casi asegurarse que muchos hispanohablantes de otras latitudes pueden entender el mensaje que el verbo transmite. Esto así porque han estado expuestos al contacto con los hispanohablantes de las Antillas.
Sería interesante poder determinar en cuál de las islas se originó el uso del verbo. Es muy probable que los dominicanos fueran quienes originaron el uso porque son quienes más plátanos comen en el Caribe. Esto significa que el plátano es una parte importante de la vida de los dominicanos. De una forma u otra, en Nueva York a los dominicanos algunos hispanos los llaman los “plátanos” por el gran consumo que hacen de esa musácea.
La “traducción” al español general de aplatanarse es acriollar(se) y, mayormente se usa para aplicárselo a los extranjeros que se acostumbran o adoptan los gustos de los dominicanos.
Hasta el momento en que se encontró en esta cita, el verbo solo se había encontrado aplicado a personas. En el caso específico de la cita se usa para recomendaciones, es decir, para propuestas o medidas planteadas como apropiadas. En la cita debe interpretarse este aplatanarse en tanto adaptar las recomendaciones al medio dominicano.
Esto tipo de uso podría considerarse como un ensanchamiento del campo semántico. No hay necesidad de exagerar el hecho, pues los lexicógrafos casi siempre están atentos a este tipo de fenómenos para determinar si se convierten en una práctica y en consecuencia, consignarla en los nuevos repertorios.
El plátano dominicano, que no es el guineo, ha dado lugar a varias locuciones muy populares en el habla de los dominicanos. Hay una que llama la atención porque se interpreta de modo diferente en Puerto Rico y República Dominicana. “Tener alguien la mancha del plátano” en Puerto Rico es manifestar la naturaleza o carácter del puertorriqueño típico. “Tener [todavía] la mancha del plátano” es para los dominicanos mostrar alguien su origen campesino mediante comportamiento o gustos.
No puede olvidarse que en España se conoce con el nombre “plátano” lo que en otras latitudes es llamado banana. Se ha observado que en la actualidad los dominicanos consumen muchos guineos verdes hervidos. Esos son llamados “guineítos” o “guineítos verdes”. Algunas personas prefieren llamarlos bananos, así en masculino, para diferenciarlos de los que se consumen sin cocer que continúan con el nombre de bananas.
El otro verbo que figura en el título, tropicalizar, existió en el uso de los dominicanos. Se usaba para aplicárselo a los aparatos que eran fabricados con estándares especiales para que pudieran usarse en los países tropicales.
En muchos casos esos enseres del hogar estaban protegidos desde la fábrica para resistir la herrumbre o soportar la humedad del ambiente que impera en los países de las zonas del trópico. Se recuerda, por ejemplo, los radio receptores de mayor duración eran los tropicalizados porque aseguraban más larga vida útil.
Este último verbo no aparece en los diccionarios diferenciales con este valor. Quizás esto se deba a que el verbo cayó en desuso con los avances de las ciencias y la tecnología.
MAGMA
“Pero LA MAGMA intelectual y vital. . .”
Algunas personas que escriben en los medios de comunicación masiva escriben con la intención de llamar la atención por medio de figuras innovadoras. Eso es lo que parece que sucedió en la frase copiada a guisa de ejemplo en esta sección. “Magma intelectual y vital” no pertenece al español de todos los días. Como ocurre con frecuencia en casos como este, se expone quien de ese modo escribe a incurrir en error.
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