El participio impedido va seguido de la preposición de, y no a, para introducir el complemento que expresa la acción que se impide.
En los medios de comunicación dominicanos aparecen con frecuencia frases como «El presidente de turno se vio impedido a buscar la reelección», «La población […] se ve impedida a acceder a elementos tecnológicos» o «La artista contó entre lágrimas cómo se vio impedida a trabajar en una obra de teatro».
Como consta en el Diccionario de la lengua española, impedir, con el significado de ‘imposibilitar la ejecución de algo’, es un verbo transitivo que, como tal, introduce su complemento sin necesidad de preposición (La pandemia no le impide viajar por el mundo); no obstante, cuando se trata del participio en función de adjetivo, el complemento directo se transforma en un complemento introducido por la preposición de (impedido de, no impedido a), al igual que otros participios/adjetivos procedentes de un verbo transitivo: merecedor de, necesitado de.
Así, en los ejemplos citados lo más apropiado habría sido escribir «El presidente de turno se vio impedido de buscar la reelección», «La población […] se ve impedida de acceder a elementos tecnológicos» y «La artista contó entre lágrimas cómo se vio impedida de trabajar en una obra de teatro».