Las voces narcomenudo, narcomenudeo y microtráfico, referidas al comercio de drogas ilícitas en pequeña escala, son neologismos válidos en español.
En los medios de comunicación dominicanos es muy común encontrar estos neologismos en reseñas sobre el crimen organizado: «La Policía dice mantiene persecución contra el microtráfico de drogas en Santiago», «Los tentáculos del crimen organizado, el microtráfico, el uso y la negociación de sustancias controladas, parecen ganar la batalla», «La socióloga y especialista en narcotráfico y organizaciones criminales es una de las investigadoras que viene advirtiendo del avance del narcomenudeo en la última década».
Los términos narcomenudo y narcomenudeo están constituidos por el elemento compositivo narco- (que significa ‘droga’) más el adjetivo menudo (‘de pequeño tamaño’) y el sustantivo menudeo (‘acción de menudear’, ‘venta al por menor’), mientras que microtráfico nace de micro- (‘muy pequeño’) y tráfico (‘acción de traficar’, en concreto el ‘tráfico de drogas‘). Se trata de palabras correctamente formadas en español cuyo uso no hay que censurar, al igual que otras similares como narcotraficante, narcodólar, narcopolítica, narcoavioneta, microestructura, microbús, microclima, etc.
Todas estas voces deben escribirse sin guion ni espacio (narcomenudo, narcomenudeo y microtráfico, no narco-menudo, narco menudo, narco-menudeo, narco menudeo, micro-tráfico ni micro tráfico), pues la Ortografía de la lengua española establece que las voces prefijadas constituyen una unidad morfológica y prosódica, y por ello se escriben con el prefijo soldado gráficamente a la base a la que afectan.
En la escritura no es preciso destacar estas palabras mediante cursivas o comillas, pero puede recurrirse a ellas si se desea señalar la novedad del término.
Por todo lo anterior, los ejemplos citados pueden considerarse correctos.
Ver también narco-Estado, forma correcta