El verbo abjurar, que tiene el sentido de ‘retractarse, renegar de algo’, no es sinónimo de adjurar, que se refiere a ‘rogar, pedir con insistencia’, por lo que es inapropiado emplearlos indistintamente.
No obstante, en los medios de comunicación dominicanos se encuentran con frecuencia ejemplos en los que se usa adjurar en lugar de abjurar: «Adjurar de sí mismo no aprovecha, sino que provoca situaciones que después se lamentan», «Postuló la igualdad y la dignidad como símbolos de la propia naturaleza del hombre, aun cuando adjuró del cristianismo y abrazo la ideología marxista», «No puede adjurar del equilibrio y la legitimidad; no puede hacer insostenible el orden social y económico» o «Bajo ningún concepto quiere decir que el presidente vaya por ello a adjurar de su juramento institucional democrático».
El Diccionario de la lengua española define adjurar como la acción de ‘rogar encarecidamente, pedir con instancia y con alguna fórmula de autoridad algo’ y lo considera un verbo desusado. En cambio, abjurar, se define como ‘retractarse, renegar, a veces públicamente, de una creencia o compromiso que antes se ha profesado o asumido’. Este verbo puede usarse como transitivo (abjurar sus creencias) o como intransitivo, en cuyo caso introduce el complemento que expresa aquello de lo que se reniega con la preposición de (abjurar de sus creencias).
Teniendo esto en cuenta, en los ejemplos anteriores lo apropiado habría sido escribir «Abjurar de sí mismo no aprovecha, sino que provoca situaciones que después se lamentan», «Postuló la igualdad y la dignidad como símbolos de la propia naturaleza del hombre, aun cuando abjuró del cristianismo y abrazó la ideología marxista», «No puede abjurar del equilibrio y la legitimidad; no puede hacer insostenible el orden social y económico» y «Bajo ningún concepto quiere decir que el presidente vaya por ello a abjurar de su juramento institucional democrático».