La expresión tener derecho se construye con las preposiciones a (tener derecho a reclamar) o de (tener derecho de reclamar), por lo que resulta inapropiado omitirlas.
Pese a ello, se encuentran con frecuencia en los medios de comunicación ejemplos en los que se suprime la preposición, como se muestra en estos casos: «Todo el que se quiere desahogar en las redes por una mala experiencia con un banco tiene derecho hacerlo», «Si algo así le pasa tiene derecho mencionar el atropello por medios públicos», «No tiene derecho ser presidente» o «Ellos tienen derecho hablar, pero nunca a nombre del partido».
Según indica el Diccionario panhispánico de dudas el sustantivo derecho, con el sentido de ‘posibilidad legal o moral de hacer algo’, requiere que se usen las preposiciones a o de para introducir el complemento que indica aquello a lo que se tiene derecho.
Teniendo esto en cuenta, en los ejemplos anteriores lo adecuado habría sido escribir «Todo el que se quiere desahogar en las redes por una mala experiencia con un banco tiene derecho a hacerlo», «Si algo así le pasa tiene el derecho de mencionar el atropello por medios públicos», «No tiene derecho a ser presidente» y «Ellos tienen derecho a hablar, pero nunca a nombre del partido».