El sustantivo bacanal, con el que se alude a cualquier fiesta o actividad que se lleve a cabo con excesos, es femenino, por lo que resulta inadecuado su empleo como masculino.
En los medios de comunicación dominicanos se utiliza a menudo la voz bacanal como si se tratara de un término masculino, quizás por asociación con carnaval: «Como está llegando la Semana Mayor, y con ella vienen el bacanal, los viajes y excursiones y debemos hacer muchos gastos, es conveniente que tengamos algunos cuidados», «La generación de sus abuelos presencia el bacanal en que se ha convertido la Semana Santa con justificado espanto» o «Si ahora la indisciplina de amplios sectores de la sociedad frente al toque de queda está llegando a niveles de libertinaje, ¿qué será en Navidad […] con gente en jolgorio y un bacanal permanente?».
Según registra el Diccionario de la lengua española, el sustantivo bacanal, cuyo origen se relaciona con Baco, el dios del vino en la mitología romana, y las fiestas celebradas en su honor, se define como una ‘orgía con mucho desorden y tumulto’. Al tratarse de una palabra de género femenino, la concordancia se establece con el artículo la y cuantificadores femeninos como una, varias, muchas, etc., así como con adjetivos en femenino.
Siendo así, en los ejemplos citados lo apropiado habría sido escribir «Como está llegando la Semana Mayor, y con ella vienen la bacanal, los viajes y excursiones, y debemos hacer muchos gastos, es conveniente que tengamos algunos cuidados», «La generación de sus abuelos presencia la bacanal en que se ha convertido la Semana Santa con justificado espanto» y «Si ahora la indisciplina de amplios sectores de la sociedad frente al toque de queda está llegando a niveles de libertinaje, ¿qué será en Navidad […] con gente en jolgorio y una bacanal permanente?».