En expresiones como los mejor valorados, los peor vestidos o los mejor cotizados las palabras mejor y peor se mantienen invariables en singular.
A propósito de que el presidente Luis Abinader fue clasificado como el presidente con la mayor tasa de aprobación entre mandatarios de América Latina, en los medios de comunicación dominicanos no es raro encontrar frases como «El primer mandatario de la República Dominicana, Luis Abinader, se encuentra entre los presidentes mejores valorados del mundo», «El presidente Luis Abinader ocupa el 3er lugar de mandatarios mejores valorados del mundo» o «Entre los peores valorados están Pedro Castillo (Perú) con 26 % de aprobación; Alberto Fernández (Argentina) con 25 %; Iván Duque (Colombia) con 23, y Nicolás Maduro, presidente de Venezuela, sin datos».
Tal como indica el Diccionario panhispánico de dudas, cuando mejor o peor anteceden a un participio son las formas comparativas de bien y mal, por lo que en estos casos no funcionan como adjetivos, sino como adverbios y, como tal, no varían en número.
Así, en los ejemplos citados lo correcto habría sido escribir «El primer mandatario de la República Dominicana, Luis Abinader, se encuentra entre los presidentes mejor valorados del mundo», «El presidente Luis Abinader ocupa el tercer lugar entre los mandatarios mejor valorados del mundo» y «Entre los peor valorados están Pedro Castillo (Perú) con 26 % de aprobación; Alberto Fernández (Argentina) con 25 %; Iván Duque (Colombia) con 23, y Nicolás Maduro, presidente de Venezuela, sin datos».
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